Está cambiando la forma de trabajar y de entender el trabajo debido a los cambios económicos y sociales que están teniendo lugar, además de la continua incorporación de nuevas tecnologías consecuencia del mundo globalizado en el que vivimos. Actualmente todas las compañías tratan (y en su gran mayoría, lo consiguen) de dar respuesta a las demandas de sus consumidores en tiempo récord, lo que supone tener un equipo de trabajo comprometido y preparado para esta nueva situación. Todas las empresas desean tener empleados más satisfechos, motivados y productivos que mejoran la creación de la marca, también en el ámbito digital. Hay que tener en cuenta además que el futuro del mercado laboral reside en los Millennials, considerados un perfil altamente preparado en temas de tecnología, con una mentalidad disruptiva frente al modelo tradicional. Será una generación donde se “desee” trabajar, y no donde se “necesite”.

Como consecuencia de todos estos cambios tecnológicos, el mercado laboral se ha visto afectado por nuevas tendencias que han irrumpido con fuerza en él: el Big Data, internet de las cosas, robótica, dispositivos móviles, etc. van a suponer una disrupción en el empleo del futuro por dos motivos: el primero, por la necesidad de contar con expertos que gestionen, controlen y actualicen las nuevas tendencias; y el segundo, por los nuevos conceptos de movilidad y trabajo en equipo.

Concretamente, la llegada del Big Data se considera la 4ª Revolución Industrial, e implicará la destrucción de 7 millones de empleos a nivel mundial hasta 2020, pero también una creación de 2,1 millones de nuevos puestos donde informáticos, ingenieros y matemáticos serán los más solicitados debido a su capacidad de análisis de datos. Y que los perfiles técnicos empiecen a disputar por el liderazgo en la escala de prioridades de las empresas con los comerciales supone un hecho de cambio en la tendencia. Según un estudio realizado por el EAE en colaboración con la Asociación Española de Directivos de Recursos Humanos (AEDRH), revela que la de analista de datos es la posición más solicitada por los 312 responsables de RR.HH. (en su mayoría de compañías de más de 250 y 500 empleados) consultados para elaborar el informe. Hoy día se trata del segundo perfil más complicado de encontrar y, según prevén ellos mismos, será la que más se cotizará en los próximos tres años.

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